Suspensiones neumáticas
Nos tendremos que remontar seguramente al año 2003, cuando empezaron a aparecer las primeras suspensiones neumáticas con una gra ventaja respecto a todo lo que había hasta la época: podíamos regular la altura de nuestra obra de arte andante en función de las circunstacias. Así, podíamos dejar el coche completamente apoyado en el suelo o sortear un badén sin oír el chasquido de fibra rozando contra el suelo, señal inequívoca de que habíamos topado con los límites del física. ¿Quién no se quedó sorprendido cuando en cierta película un Civic blanco bajaba la altura del vehícula apretando dos botones en cuestión de segundos?
Todavía recuero la cara que puso el inspector de la ITV cuando le dejé el coche literalmente en el suelo en plena inspección para legalizar el vehículo. Precisamente, en la ITV ha sido donde se han lidiado batallas terribles de cara a unificar criterios en la homologación de suspensiones neumáticas, hasta el punto de que hubo una época en que se pararon todas las homologaciones en Cataluña. Después se marcaron pautas comunes para legalizar las suspensiones. Sin lugar a duda el Reglamento de Reformas vigentes no estaba preparado para asumir tal evolución técnica.
Fundamentos técnicos
Balonas: básicamente la suspensión parte del principio de sustituir los muelles y otros elementos de absorción de baches (ballestas, barras de torsión, etc.), por balonas de aire como las que montan los camiones pero a menor escala. Añadiendo más presión o menos a cada balona, metiendo más o menos aire, vamos a conseguir una u otra altura del vehículo,
Compresor / Calderín: el sistema parte de un compresor que coge aire a presión atmosférica, lo comprime y lo almacena en un calderín. De esta forma el compresor no tiene que estar funcionando continuamente y sólo se pone en marcha cuando el calderín baja a una determinada presión.
Electroválvulas: el paso de más o menos aire a las balonas de cada rueda (o cada eje) se regula mediante una electroválvulas que según las ordenes que recibe de los mandos (que nosotros manejamos) meten o sacan aire de cada balona, produciendo los característicos silibidos de entrada o salida de aire.
Reloj de presión: de cara a ayudarnos a controlar el funcionamiento de la suspensión y de ajustar la presión, los mandos disponen de relojes de presión. Por norma general y dependiendo del vehículo nos moveremos en presiones de 2-6 bares, pero cada coche en función del tipo de suspensión, kit de carrocería, rueda, etc., requiere un tarado específico.
Legalización de la suspensión
La instalación de una suspensión neumática requiere de legalización (reforma nº 9 del reglamento). Si bien es cierto que para circular -por norma general- no van poder saber si llevamos suspensión neumática (a no ser que vayamos botando o que nos vean en el preciso momento que regulamos), en la ITV no nos escapamos en el momento en que pasamos el foso, ya que allí donde un día hubo muelles, se encontrarán con una obra de ingeniería materializada en nuestra suspensión neumática.
Como he comentado anteriormente, en su día hubo bastante tempestad en relación a qué requisitos tenían que llevar las suspensiones neumáticas para poder homologarse, pero después de la tempestad llega la calma.
Cada uno en su sitio
Los que me conocéis sabéis lo pesado que soy respecto a la importancia de que dejéis vuestro coche en manos de profesionales para evitar sustos y problemas en el futuro, ya que en el sector del tuning por desgracia existe mucho intrusismo de gente que se mete en el mundillo pensando que haciendo cuatro chapuzas se van a hacer de oro a costa de nuestro esfuerzo y nuestras ilusiones (algún instalador de suspensiones con nombre y apellidos está prácticamente en busca y captura).
Hablar de suspensiones neumáticas con nombre y apellidos es hablar de dos grandes profesiolaes que se corresponden con dos marcas comerciales diferentes. Estos dos profesionales trabajan en diudades diferentes que el destino ha querido que entre ellas exista apenas 50 kilómetros. Si bien es cierto que existen otras suspensiones en el mercado, muchas veces más económicas y pensadas para implantarse a modo de kit a gran escala, la grandeza de estos gigantes ha sido la constante evolución técnica que no ha parado desde que salieran a la luz, haciendo que otros fabircantes estén a años luz de fiabilidad, en rapidez de funcionamiento y en sofisticación de la tecnología.
A día de hoy muchos fabricantes y distribuidores de elementos de suspensión tiene reformas generalizadas que nos incluyen la Homologación de sus muelles para que en ITV nos lo apuntes en ficha técnica. Mi consejo es que os aseguréis este tanto para no tener problemas el día de mañana, consultando en vuestro puesto de venta asegurándoos que vuestro coche y versión está incluido en las homologaciones del fabricante.
Recomendaciones de configuración: a modo de opinión personal y viendo la multitud de configuraciones posibles que os pueden realizar al montar una suspensión neumática comentaros que pese a lo espectacular que pueda resultar que un coche se clave en el suelo tenemos que pensar en el uso que le vamos a dar. Si es un 'show car' y no lo vamos a mover, prácticamente no hay problema, pero si vamos a circular bastante os aconsejo una configuración de suspensión de forma que no tengamos que circular a mucha presión para no dejarnos los bajo en cada badén y de forma que la mínima altura del suelo a paragolpes / taloneras no baje de los 10 centímetros, ya que un simple animal, tablón o irregularidad puede hacernos grandes destrozos en el coche. Pero como siempre, hablar con los profesionales que va a hacer la modificación para que os aconsejen sobre cómo configurar la suspensión para el uso que le queréis dar.
¡A tener en cuenta!
De cara a no tener problemas para legalizar la suspensión se piden varios requisitos:
1- Mando regular de la suspensión neumática fuera del habitáculo. Aquí cada ITV nos aplicará sus criterios, pidiendo algunas que esté el mando en el vano del motos y a otras les valdrá que esté en el maletero.
2- Indicador de presión en la zona del salpicadero de forma que podamos ver a tiempo real si existe una avería o fallo en el sistema de suspensión.
3- Limitador de recorrido de forma que en la posició más baja de suspensión no toquen las ruedas con la carrocería (incluyendo de forma expresa el giro del volante girando a ambos lados).
4- Todas las ruedas deben subir y bajar a la vez con un único mando de accionamiento. Estos puntos van a misa sobre todo en Catalunya. En otras comunidades cada uno aplica el criterio que cree conveniente (hablamos de inspectores de ITV). Como complemento técnico es importante saber qeu aqeullos vehículos que no dispongan de ABS, deberán regular la válvula de compensación de frenada del eje trasero, ya que el bajar el coche lo engañaremos haciéndole pensar que circula cargado y carreremos el peligro de clavar los frenos traseros con el correspondiente derrape.
Para cualquier tipo de duda consulta en los centos de homologación´.
Texto escrito por Sergio López (RH+ Homologaciones), y publicado en el número 89 de la revista GTi Mag (pág. 160-161).
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